La importancia de lavarse las manos
La OMS afirma que se pueden salvar hasta 230.000 vidas al año
Lavarse las manos es uno de los hábitos de higiene más conocido por todos
Desde muy pequeños hemos oído la frase en boca de nuestras madres de “lávate las manos que tenemos que comer”. Y es que desde siempre nos han enseñado que lavarse las manos es algo muy importante para no coger ningún tipo de infección o bacteria. Aunque sabemos la importancia de este acto, ¿realmente sabemos como puede influir en nuestra salud?
En el Siglo XIX empezaron a lavarse las manos antes de realizar cualquier tipo de cirugía. Todo esto empezó a hacerse gracias a Felipe Semmelweis, que comparó la media de supervivencia entre las mujeres que daban a luz en su casa y las que daban a luz en un hospital. Las que tenían a sus hijos en casa tenían entre un 30 y un 96% más de probabilidades de fallecer por fiebre puerperal. Semmelweis colocó un lavabo desinfectante y a partir de ahí la mortalidad descendió debajo del 1%.
La OMS y lavarse las manos
Desde el año 2008, la Organización Mundial de la Salud celebra cada 15 de octubre el Día Mundial del Lavado de Manos. Según sus informes con esta práctica se podrían salvar hasta 230.000 vidas al año. Por eso la OMS ofrece una serie de recomendaciones para hacerlo correctamente.
• Siempre hay que lavarse con agua y jabón, nunca con agua sola. Gracias al jabón y al frotarlo con nuestras manos podemos eliminar grasas y suciedades que llevan consigo miles de microorganismos.
• Siempre hay que realizar está acción después de momentos significativos como puede ser la manipulación de alimentos, el hecho de limpiar a un niño o justo después de haber hecho nuestras necesidades.
• La mejor forma de lavarse las manos es coger el jabón y restregarlo por toda la superficie de las manos (dorso, palmas y uñas) durante al menos 20 segundos. Justo después debemos mojarlas con aguas y secarlas con una toalla.